Casos de impersonalidad

29.08.2014 23:35

Casos de impersonalidad:

 

·  Con el verbo haber. Se da cuando el verbo funciona autónomamente, con el significado léxico de existir. Es impersonal porque no hace referencia explícita a un sujeto, y solo se puede conjugar en 3ª persona del singular.

·   Con el verbo hacer. Este verbo, en las construcciones impersonales, al igual que el verbo haber, solo puede conjugarse en 3ª persona del singular y obligatoriamente es seguido por un sintagma nominal que, en su caso, implica temporalidad o estado atmosférico.

· Con los verbos ser, estar y parecer. El verbo parecer funciona en construcciones impersonales, inmovilizado en la 3ª persona del singular, solamente cuando no hace referencia explícita a un sujeto y antecede a una oración subordinada sustantiva. Los verbos ser y estar funcionan como impersonales en construcciones que expresan fenómenos naturales, generalmente meteorológicos. No hacen referencia explícita a un sujeto y se conjugan solamente en 3ª persona del singular.

·   Con verbos que refieren a fenómenos atmosféricos. Estos verbos, dada su naturaleza semántica, no pueden hacer referencia explícita a un sujeto y solo se conjugan en la 3ª persona del singular. Por esa razón, algunos gramáticos os llaman unipersonales. Un uso especial de estos verbos es el metafórico. En ese caso, ya no son impersonales, y sí pueden hacer referencia explícita a un sujeto.

·    Con verbos en 3ª persona del plural. Esta construcción impersonal responde a una opción expresiva del enunciador, y no tiene carácter obligatorio. Tanto en las construcciones impersonales con verbos en 3ª persona del plural como en las que presentan un sujeto léxico de carácter colectivo, el sujeto de la acción queda indeterminado.

·    Con se. Se construye con el pronombre personal átono se seguido de un verbo conjugado obligatoriamente en la 3ª persona del singular. El pronombre inhabilita la presencia de un sujeto explícito.

·    Con verbos en 1ª persona del plural. Plural sociativo: implica al receptor en el proceso discursivo. Plural de modestia: encubre la presencia directa del enunciador, mediante la 1ª persona del plural. En ambos casos se trata de procedimientos de carácter subjetivo, por los que opta el enunciador, colocando su persona en un segundo plano y solidarizándose con el receptor.

·       Con verbos en infinitivo. Al tratarse de una forma verbal no conjugada o no personal, no aporta información gramatical de persona, número, tiempo y modo. Como consecuencia, el sujeto que realiza la acción queda indeterminado; de ahí el carácter impersonal de estas construcciones en infinitivo.

·     Con la 2ª persona del singular. No es necesaria la presencia de un verbo, basta con la existencia de un pronombre de 2ª persona (te, tú, tu) para generar un contexto impersonal. Puede hacer referencia explícita a un sujeto. Es importante tener en cuenta que este tipo de construcciones depende del contexto en el que aparece para ser considerada o no impersonal.

·     Con el sujeto uno/a. Esta construcción posee un sujeto léxico, pero se trata de un sujeto indeterminado, y eso es lo que genera la impersonalidad. El sujeto léxico está expresado mediante el pronombre indefinido uno/a.

Lucián, Eliana; Marquisio, Gladis; Español. Las palabras en juego, Montevideo, 2012, Ed. Santillana.